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Luis Ernesto Aparicio Montiel (nacido en Maracaibo, en la populosa barriada de Valles Fríos, cerca de la Avenida El Milagro, un 29 de abril de 1934) es un beisbolista venezolano que jugó en las Grandes Ligas del Béisbol entre 1956 y 1973. Hijo del también jugador Luis Aparicio Ortega, conocido como El Grande de Maracaibo, quien falleció prematuramente antes de cumplir sus 60 años de edad. Su madre Herminia, si pudo vivir más de 99 años para disfrutar de la gloria de su hijo Luisito.
Luis Aparicio hijo, conocido como El Junior, o El Soldado, dió sus primeros pasos en el Béisbol profesional con el equipo Gavilanes de Maracaibo, una novena en la cual su tío Ernesto, fungía como dueño. Un 18 de noviembre de 1953, Día de La Chinita, patrona de Maracaibo y del Estado Zulia, en un juego entre Gavilanes y Pastora, en un sencillo acto, recibió el guante de manos de su padre, como legado, y a partir de ese momento comenzó a labrar su leyenda en el beisbol como uno de los mejores short stops de todos los tiempos...
Luis jugó en Venezuela 13 temporadas, en las que logró 393 imparables. En Venezuela además de jugar con Gavilanes también lo hizo con Los Leones del Caracas, los Tiburones de La Guaira, las Águilas del Zulia y los Cardenales de Lara, actuando en una final con Industriales.
Luis jugó en Venezuela 13 temporadas, en las que logró 393 imparables. En Venezuela además de jugar con Gavilanes también lo hizo con Los Leones del Caracas, los Tiburones de La Guaira, las Águilas del Zulia y los Cardenales de Lara, actuando en una final con Industriales.
Su debut en Grandes Ligas fue el 17 de abril de 1956, con los Medias Blancas de Chicago. Al final de esa temporada fue nombrado novato del año. Jugó con Chicago hasta 1963 cuando fue cambiado al equipo Baltimore Orioles donde jugó hasta 1967. Al finalizar la temporada, Aparicio regresó a los White Sox donde jugó entre 1968 y 1970. Al terminar la temporada fue cambiado a los Boston Red Sox, donde jugó entre 1971 y 1973.
Entre sus mayores logros se encuentra el liderato en bases robadas de la Liga Americana nueve años seguidos, con un total de 506 bases robadas en su carrera, y ser ganador de la Serie Mundial con los Orioles en 1966.
Al momento de su retiro, Aparicio era líder de todos los tiempos en juegos jugados, asistencias, y doble matanzas para un shortstop de grandes ligas así como otros récords.
Recibió gran cantidad de reconocimientos durante su carrera, incluyendo su participación en 10 juegos de las estrellas y nueve Guantes de oro.
Luis Aparicio fue elegido al Salón de la Fama del béisbol en 1984, siendo hasta la fecha el único venezolano en alcanzar este logro.
