Hace ya muchos a#os, cuando yo trabajaba en la antigua PDVSA (en esa época aún no era Pdvsa), ----específicamente en Lagovén La Salina-, con frecuencia iba a dormir en mi ciudad natal de Maracaibo.
Salía muy temprano de madrugada hacia Cabimas, a fin de """pegarme a trabajar""a las siete de la mañana.
Por cierto hago referencia a las siete de la mañana porque un Gerente muy querido y recordado de la Division de Occidente de Lagoven, el Ing RAFAEL RAMIREZ, decía que las siete de la mañana NO era la hora para entrar por el portón principal. ERA LA HORA A LA CUAL UNO DEBÍA DE ESTAR SENTADO EN SU ESCRITORIO O ESTAR EN SU SITIO DE TRABAJO! (El personal diario ""pegaba"" a las seis y media de la mañana).
Pues bien, cuando iba en mi vehículo y tomaba la carretera H para entrar a Cabimas, siempre veía a un famoso LOQUITO de Carretera caminando por el borde de la misma yendo hacia Cabimas o saliendo de Cabimas.
El susodicho personaje, quien utilizaba una barba muy larga, y ropa de kaki bastante deteriorada, con mirada perdida, siempre caminaba descalzo por el borde de una carretera muy angosta (en ese entonces) como la famosa H.
Se me hizo ya muy frecuente verlo a lo lejos (con las luces de mi vehículo) y recortar la velocidad como medida de precaución, no fuera a saltar a la vía.
Durante meses y meses, lo estuve viendo hasta que durante una semana completa dejé de verlo....
Pensé que pudiera estar enfermo...
En una de esas se me ocurrió pararme en un sitio vecino a la carretera y preguntarle a un parroquiano del lugar...
?Que pasó con mi amigo el loquito, infatigable caminante de la H?
El parroquiano extrañado, se me quedó mirando y me dijo...
Lo enterramos hace una semana. Se lo llevó un carro por delante.
QUE DIOS TENGA EN LA GLORIA A ESE SER BUENO PERO DESQUICIADO, --MI FAMOSO LOQUITO DE LA H.
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